Cómo disfrutar de tu boda y no estresarte el día del evento (aunque lo planifiques tú misma)

Después de meses de organización, llega el día más esperado: tu boda. Y aunque planificarla tú misma te ha dado control y satisfacción, también es normal sentir ansiedad de que algo salga mal. La clave está en organizarte de forma estratégica y delegar lo necesario para que ese día solo te dediques a disfrutar.

1. Cierra los asuntos pendiente una semana antes de la boda

• Revisa pagos, confirmaciones de suplidores e invitados.

• Prepara el timeline definitivo y compártelo con todos los involucrados.

• Deja listo tu vestido y accesorios para evitar sorpresas de último minuto.

  
  

2. Delegar es la mejor estrategia

• Elige a una persona de confianza (hermana, amiga o dama de honor) para atender imprevistos, es recomendable que sea una persona que conozca los gustos y preferencias de la pareja que se va a casar para que sus decisiones sean más afines a las de los novios.

• Así podrás concentrarte en vivir tu día especial sin estar pendiente de llamadas o tomando decisiones.

  
  

3. Ten un kit de emergencia nupcial

Incluye: maquillaje básico, desodorante, curitas, aguja e hilo, agua, snacks y cualquier medicamento personal.

4. Reserva tiempo para ti

• Empieza tu día con calma: un buen desayuno y música relajante.

• Programa tiempo extra para maquillaje y peinado, así evitas correr.

• Regálate un momento a solas antes de caminar hacia el altar.

  
  

5. Acepta que no todo será perfecto

La magia está en la experiencia, no en la perfección. Si algo se retrasa o se sale del plan, sonríe y sigue adelante. Lo que tus invitados recordarán será tu felicidad.